La verdad es que en mis entradas sobre la forastera siempre me quedó pendiente hablar de ellos. No sé si por respeto o miedo, o porque al final siempre se me olvidaba hacerlo. Soy un desastre de mujer, qué le vamos a hacer.
Está bien… Preparaos porque hoy os revelare parte de los frutos de mi investigación, los secretos ancestrales del consejo de ancianos de mi pueblo, aunque al final me declaren maldita. Total… ya me declararon extranjera en mi propia tierra y una maldición más no me hará ser diferente a quién soy jajajajajajajaja.
Hasta donde llega mi memoria, siempre han estado ahí. Y aunque van cambiando sus miembros, a algunos los recuerdo de tiempos muy lejanos.
Estoy convencida de que ellos poseen la verdad de todo el universo. Nos conocen a los que vivimos aquí a la perfección, y seguramente no estaríamos en este lugar si no fuera por ellos.
Joder, incluso saben qué tiempo hará mañana. De verdad que lo saben, no es broma, que hace unos meses escuché decir a uno que este invierno sería de aguas, y vaya lo que ha llovido. Claro, que le escuché de lejos, porque acercarse a ellos impone, y la verdad, ahora que lo pienso, no le vi mover los labios…
Se les ve reunidos en el corazón de mi pueblo, y siempre bajo el sol. ¿Habéis visto city of angels? Pues casi igual que la escena en la que se reúnen los ángeles al amanecer para ver como el sol va apareciendo, y con el mismo silencio…
No veáis como acojona porque a veces de lejos les oyes hablar, pero cuando pasas delante de ellos y les saludas con un ademan de cabeza (es el ritual del saludo), ellos te lo devuelven y nada, sólo silencio, y cuando vuelves a estar lejos, vuelves a oír sus murmullos. En ese momentos miro al cielo y pido que por favor no estén hablando de mí, jajajajajajajajajaja.
Lo que más me molesta es que entre sus miembros no ha habido nunca una mujer, aunque creo que ellas tienen sus propios grupos, uno de ellos el de las asiduas. Muchas son sus mujeres y mientras sus maridos deciden que va a ser de este mundo mundial, ellas se dedican a preparar las pócimas para enfrentarse al mañana con el estómago lleno.
No hay nada que no se haga aquí sin que se pida su opinión. O si no se la piden, ellos la dan igualmente. No veáis cuando hace unos meses vinieron a arreglar el alcantarillado. Por unos días cambiaron su lugar de reunión por el centro de la obra, y allí veías a los trabajadores acojonaditos mientras ellos no les quitaban sus ojos de encima. Es que de verdad imponen, jajajajajajajaja.
¿Aburrimiento? NOOOOOOOOO, para nada. Es que como buen consejo de ancianos todo tiene que estar supervisado por ellos…
Pero bueno, podría contaros más cosas, quizás vayan saliendo.
Un besazo (¿Y la foto de abajo?. Yo que sé, es que me gustó jajajajajajajajajajajaja, quizás la utilice en algún cuento).
Divertida has de estar con un grupo tan ancestral, pero creo que ellos se divierten más con la forastera, jejejeje.
ResponderEliminarLa foto genial, como dices propia para un cuento, animate, que ya lo espero.
Petonets y bon profit
Los ancianos de mi barrio están atornillados a los bancos mirando a la nada.
ResponderEliminarBesos.
Joder, parece como si ellos fueran los Presidentes de una sesión de los Jedi en todos su apogeo:P.
ResponderEliminaryo cuando sea anciano también miraré ( como ahora ) los traseros de las forasteras, de las nativas y de las güiris.
ResponderEliminardicen que con los años atesoras sabiduría
beso
jajajjaja, me río por el comentario de javier...jajajajjajajajaaja
ResponderEliminarte mirará el culo niña!! jajajaja eres forastera
jajajajja
que me encantó venir...y enterarme del secreto...
o no me he enterado?
Un besazoooo
Hace mucho que no escucho a un anciano sabio, me has hecho pensar en ello, tal vez sea porque no los haya en Buenos Aires o quizás porque yo ya pertenezca al grupo y todavía no me di cuenta... bueno, no creo, aún me faltan un montón de años. Lo cierto es que debe ser bastante intimidante su presencia, al menos así los pintas.
ResponderEliminarQuería contarte que este espacio tuyo -libre, divertido, inteligente- me está dando ganas de subir unas reflexiones acerca de los blogs y sus creadores, pero no me animo, !En serio lo digo, eh!
Te dejo un beso enorme, querida amiga.
Humberto.
Creo que era Woody Allen quien dijo hace poco que no notaba que los años te hicieran más sabio, si acaso, más prudente, tal vez por cansancio. Lo que no cabe duda es que la perspectiva de la vida, la experiencia, es un tesoro. Y sería bueno aprender de ellos, de los ancianos. Otro asunto distinto es el aspecto "sacerdotal" que se le quiera dar a un grupo de ancianos; eso es una cuestión de cada cultura o tradición. A mí me parece que lo que necesita el anciano es sentirse acompañado y querido; eso es lo más importante. Amor y no temor.
ResponderEliminarajajajajajajaja la verdad que imponen ehhhhhh
ResponderEliminarun beso cielo
Me apunto al comentario de Javier :-)
ResponderEliminarBesos
Visto así parece que imponen un poquito…pero en el fondo seguro que son muy tiernos, y escucharlos es como un libro abierto, cargado de aventuras y sabiduría…
ResponderEliminarBsazos amiga… ;-)
Muacckss!!
En el mío yo creo que no hay y que lo que veo cuando voy son hologramas, porque siempre hacen el mismo movimiento de cabeza para hacerte el análisis y rayos x.
ResponderEliminarLuego pasan la información al resto del pueblo.
Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
ResponderEliminarla fotografía de abajo,me encantaaaaaaaaaaaa.
Besss.
Me apunto al comentario de Torito,jajajja.
ResponderEliminarQ mallllll
Besotes loca linda ;)
Sip, es una buena foto para un cuento. Y me gustó mucho la secuencia de las pócimas.
ResponderEliminarAh, es un placer leer tus comentarios Ana, seguiré viniendo mujer.
Beso
En mi pueblo también hay un consejo de ancianos y la verdad es que impone pasar por su lado ajajaja ...
ResponderEliminarPásate por mi blog que tienes premio.
¡Besos!